(DM) La única forma de quitarle la hegemonía a Peugeot en los Diesel de competencia era así: creando un auto nuevo. Y fue exactamente lo que hizo Audi con el nuevo R15, un auto que salió a romper récords en la pasada carrera de las 8 horas de Castellet en el circuito francés de Paul Ricard, es decir, en casa de Peugeot. El buen trabajo de los alemanes le significó la victoria en la general y en su categoría de la Le Mans Series. Desde el inicio de la competencia. Alan McNish sobrepasó al Peugeot que arrancó desde la pole de su categoría en manos de Sarrazin y en la tercera vuelta sobrepasó el Lola-AstonMartin de Mücke. Desde ahí, McNish y Capello no soltaron el liderato en un debutante R15 que no tuvo la más mínima falla. Al caer la bandera a cuadros, en la vuelta 266, los dos pilotos de Audi tenían 5 vueltas de ventaja sobre el Lola-AstonMartin de Mücke-Primay y el mexicano Adrián Fernández quien también realizó un buen manejo. El equipo Oreca Peugeot pasó cuarto por unos problemas técnicos al inicio de carrera. Es la primera competencia de las Series de LeMans, la próxima es en Spa Francorchamps (Mayo 9) y será la puesta a punto para las 24 de Le Mans (Junio 12-13) que no hace parte del campeonato pero todos sabemos lo emblemática que es esta carrera.
