(DM) En un campeonato lleno de deserciones, nuevos equipos y nuevo reglamento, vimos la primera carrera del año con un triunfo del asturiano Fernando Alonso en su debut con la escudería del caballino rampante. Esto solo lo había logrado Juan Manuel Fangio en 1956 cuando debutó con la scudería recién formada como Ferrari, aunque la historia de Don Enzo Ferrari tiene más años por su trabajo con Alfa Romeo. La carrera de Bahrein no superó la expectativa generada por todos los sucesos de retiro de escuderías, regreso de otras y aparición de nuevas, sumadas al retorno del gran Michael Schumacher, 7 veces campeón. El regreso de Mercedes como escudería, después de su retiro en 1955, donde solo disputó 12 GP (1954 y1955) dentro del campeonato como lo conocemos hoy de F1. La historia de Mercedes va mucho más allá previo a la segunda guerra cuando Alfred Neubauer lideraba los intereses de la estrella de 3 puntas en las competencias; hoy en día Norbert Haugh es el heredero de esta responsabilidad. Volviendo a la carrera del 14 de marzo del presente, los ingresos a pits únicamente para cambiar neumáticos, y los pesados autos cargando todo el combustible de carrera demostraron que no es mejor que el año anterior en emociones y por el contrario tendió a la monotonía. Un gran arranque de Alonso que le roba la posición a su compañero Massa, en una persecución pareja que de no ser por una falla en el auto de Vettel, el “poleman”, no habría sido posible la victoria y segundo lugar de
